Aprende a aplicar el design thinking para comprender las necesidades de tu equipo, generar ideas, crear prototipos y probar soluciones centradas en el usuario.
Empatiza con tu equipo
Antes de diseñar una solución, debes comprender el problema. La empatía es el primer paso del design thinking, así que escucha y observa a tu equipo para descubrir sus necesidades y retos. Utiliza entrevistas, encuestas u observaciones para recopilar información sobre cómo gestionan su tiempo, qué les frustra y qué les motiva. Al empatizar con tu equipo, podrás identificar oportunidades de mejora.
Idear posibles soluciones
Una vez que comprendas las necesidades de tu equipo, genera ideas para posibles soluciones. La ideación es el segundo paso del design thinking, y consiste en generar tantas ideas como sea posible sin juzgarlas. Utiliza técnicas como mapas mentales, bocetos o votaciones para generar y evaluar ideas. Fomenta la creatividad y la colaboración con tu equipo.
Prototipar sus soluciones
Selecciona las ideas más prometedoras y conviértelas en prototipos tangibles. La creación de prototipos es el tercer paso del design thinking, e implica crear versiones de baja fidelidad de las soluciones para probar y refinar. Utiliza herramientas simples y rápidas como papel, cartón o aplicaciones digitales. Aprende de los prototipos y obtén feedback.